Escuchar la explicación anatómica de la porción bíblica del valle de los huesos secos, entender realidades espirituales a partir del análisis de la célula, es un privilegio que han tenido los trabajadores del NGC bajo la coordinación espiritual del Pastor Alejandro Llanos. Su mente de galeno, pero también su amoroso corazón para con Alejita y sus dos hijos han sido de gran inspiración para quienes lo rodean. Gracias Pastor porque al ser un hombre pausado, sereno y dulce, has hecho historia y nos has dado salud y bienestar.